Si los viera Hermes, reiría a carcajadas,
pero nosotros y los míos nos indignamos.
No son astutos ni inteligentes,
son deshonrantes,
lo peor, dizque lo hacen a nombre del pueblo.
Todo puede suceder en nuestro hermoso país,
un aymara se cree descendiente
de los incas.
No falta quién afirma sin pudor
y públicamente,
que su esposa es reencarnación
de Bartolina Sisa.
Lo inverosímil sucede en el país
más hermoso,
Ayer, enemigos de la democracia
hoy, sus paladines,
dispuestos a defenderla como sea.
El dizque, proceso de cambio
o Revolución
Democrática cultural, sin socialistas
y comunistas,
pero, aparentando de que lo son.
Ni que decir
de algunos pobres anticomunistas
a ultranza
que, quieren un gobierno derechista,
incluso, algunos,
añoran un Gobierno Militar duro.
Todo esto, sucede, no es mentira.
Hastiados observamos,
cómo se devoran los "tigres" en estos
tiempos de hipócritas y canallas.
Tal vez, debemos, ver, esperar.
y aceptar
(filisteismo político, decía Lenin);
O, como dijera
el poeta clasista, Arsenio Maita
o R. Barenechea:
"volveré a ser cuando madure
el aire".
Eso haremos.
Carlos Rafael